¿Cómo guardar las bolsas de la compra?

Hoy hablamos de:

Bolsas plástico, cartón, papel, tela o rafia

Las bolsas de la compra son un elemento indispensable en nuestro día a día, pero a menudo pueden acumularse en nuestros hogares, ocupando espacio y desorganizando nuestros armarios.

En este artículo, descubriremos cómo guardar las bolsas de la compra de manera eficiente y sostenible, para reducir el desorden

¿Cómo guardar las bolsas de la compra de forma práctica?

Veamos paso a paso cómo guardar las bolsas:

Reutilizar antes de almacenar Antes de guardar las bolsas de plástico, asegúrate de haberlas reutilizado en la medida de lo posible. Las bolsas en buen estado pueden tener varios usos, como la recolección de basura pequeña, guardar zapatos o separar objetos en el equipaje.
Bolsa de bolsas Una excelente manera de mantener las bolsas organizadas es creando una «bolsa de bolsas». Puedes usar una bolsa de tela o incluso una caja de cartón decorada para guardar todas las bolsas de plástico que vayas acumulando. Ubica esta bolsa en un lugar accesible de tu cocina o despensa para que sea fácil almacenar y retirar bolsas según las necesites.
Rollos de cocina o papel higiénico Otra opción ingeniosa es reutilizar los rollos de cocina o papel higiénico vacíos. Dobla cuidadosamente las bolsas de plástico y deslízalas en el rollo.
Dispensador de toallitas plásticas Si tienes un dispensador de toallitas plásticas vacío, puedes darle una segunda vida como almacenador de bolsas. Simplemente retira el sello adhesivo de la tapa, introduce las bolsas plegadas y, cuando necesites una, podrás sacarla fácilmente por la abertura de la tapa.
Perchas con ganchos Otra opción útil es colgar las bolsas de plástico en un gancho adicional en el interior de un armario o despensa.
Donación o reciclaje Si ya tienes más bolsas de las que puedes utilizar, considera donarlas a organizaciones benéficas locales, que a menudo las utilizan para empaquetar donaciones. Además, asegúrate de reciclar las bolsas que están rotas o en mal estado.

¿Cómo doblar las bolsas de plástico?

Doblar una bolsa de plástico de forma adecuada puede ayudarte a ahorrar espacio y mantener tu hogar más organizado. A continuación, te presento una guía paso a paso sobre cómo doblar una bolsa de plástico de manera sencilla:

Pasos para doblar una bolsa de plástico:

Preparación:
- Antes de comenzar, asegúrate de que la bolsa esté limpia y seca. Si ha sido utilizada previamente, asegúrate de sacudirla para eliminar cualquier residuo o humedad.
Aplanar la bolsa:
- Extiende la bolsa de plástico en una superficie plana, como una mesa o el suelo, de modo que quede abierta por completo.
Doblar longitudinalmente:
- Toma la bolsa por las asas (si las tiene) o por la parte superior y dobla la bolsa a la mitad longitudinalmente, asegurándote de alinear los bordes.
Deshacer el aire:
- Asegúrate de eliminar cualquier aire atrapado dentro de la bolsa mientras la doblas. Esto hará que la bolsa ocupe menos espacio y sea más fácil de almacenar.
Doblar en forma de triángulo:
- Con la bolsa doblada a la mitad, lleva una esquina inferior hacia la esquina superior del lado opuesto, formando un triángulo.
Continuar doblando en triángulos:
- Ahora, continúa doblando la bolsa en forma de triángulo, manteniendo el mismo patrón, doblando una y otra vez hacia arriba desde la base.
Ocultar las asas (si las tiene):
- Si la bolsa tiene asas, puedes ocultarlas doblando hacia adentro una vez que llegues a la parte superior del triángulo.
Terminar el doblado:
- Continúa doblando en triángulos hasta que llegues al final de la bolsa y solo quede un pequeño rectángulo en la parte superior.
Guardar la bolsa doblada:
- Una vez que la bolsa esté completamente doblada en forma de triángulo, puedes guardarla en la «bolsa de bolsas» que mencionamos en el artículo anteriormente, o en cualquier otro lugar designado para almacenarlas de manera ordenada.

¡Listo! Ahora tienes una bolsa de plástico doblada de manera compacta y ordenada, lista para ser utilizada cuando la necesites nuevamente.

¿Y si es de tela o rafia?

Si tienes bolsas de tela o rafia y quieres mantenerlas ordenadas y listas para su uso, aquí tienes una forma sencilla de doblarlas de manera compacta:

Cómo doblar una bolsa de tela o rafia:

Preparación:
- Al igual que con las bolsas de plástico, asegúrate de que la bolsa de tela o rafia esté limpia y seca antes de comenzar el doblado.
Extender la bolsa:
- Coloca la bolsa de tela o rafia en una superficie plana, como una mesa o el suelo, y estírala para que quede completamente abierta.
Doblar por la mitad:
- Dobla la bolsa por la mitad longitudinalmente, asegurándote de alinear los bordes para obtener una forma rectangular.
Doblar en tercios:
- A partir del lado doblado, dobla un tercio de la bolsa hacia el centro.
Doblar el otro tercio:
- A continuación, dobla el otro tercio de la bolsa hacia el centro, superponiendo la parte anterior.
Doblar en forma de rectángulo:
- Dobla la parte inferior de la bolsa hacia arriba para formar un rectángulo más pequeño.
Revisar y ajustar:
- Asegúrate de que los bordes estén alineados y de que la bolsa esté bien doblada y sin arrugas.
Guardar la bolsa doblada:
- Ahora que la bolsa está doblada en forma de rectángulo compacto, puedes guardarla en tu «bolsa de bolsas» o en cualquier otro lugar destinado a su almacenamiento ordenado.

Este método de doblado es efectivo para bolsas de tela o rafia, y te permitirá mantenerlas organizadas y listas para usar en cualquier momento. Las bolsas de tela o rafia son una opción más sostenible que las de plástico, ya que pueden ser reutilizadas muchas veces, reduciendo así el desperdicio de materiales.

¿Dónde guardar las bolsas?

Guardar las bolsas de la compra y las bolsas de plástico o tela de forma organizada es importante para mantener un hogar ordenado y evitar que se acumulen en espacios innecesarios. A continuación, te proporciono algunas sugerencias sobre dónde guardar las bolsas de manera práctica y eficiente:

Dispensador o caja de almacenamiento
Ganchos para colgar
Bolsa de bolsas
Organizador de pared
Cajón o caja etiquetada
Bolsa plegable de emergencia
Colgador en la despensa

¿Para qué usar las bolsas que te sobran?

La centrifugación es una etapa en el ciclo de lavado que implica una velocidad alta de giro del tambor para eliminar el exceso de agua de la ropa. Durante este proceso, es común que la lavadora genere cierto nivel de ruido. Sin embargo, si el ruido es excesivamente fuerte, persistente o va acompañado de vibraciones intensas, puede ser indicativo de un desequilibrio en la carga, un problema con los rodamientos o algún otro inconveniente. En tales casos, se recomienda verificar la distribución de la carga y, si el ruido anormal persiste, contactar a un técnico especializado para su revisión.